la demora desmedida de este año
honestamente he pasado días
oscuros que carcomen mi tiempo,
razón y vida poco a poco.
miro el horizonte vacío e
imagino tu mirar
grisáceo y luminoso dándole
un nuevo toque de alegría,
esperanza y sentido a esta existencia
obnoxia al abismo de tu adiós.
deseo que termine pronto
esta desesperada espera:
latente e impaciente que
año con año me anima
a seguir en este caminar
determinado hacía ti,
rezando que pronto
estemos el uno con el otro
nuevamente como aquel
antaño en los columpios
lívidos ya por la niebla
intensa que desgasta los recuerdos
náufragos en la explotación del uso.
aunque de no pensarte ¿yo que haría?