jueves, 31 de diciembre de 2015

Del (feliz) año nuevo.

Ahí estás, las once le noche del día 31 de diciembre, esperando, ¿qué esperas?, no esperas nada pero estás, ahí, esperando, uno... dos... tres... y todavía son las once, !qué espera el tiempo que no pasa!

Como sea, decides pasar el tiempo de alguna manera, y como no puedes salir de la casa de tu amada tía hasta después de las doce y abrazar a todos y desearles feliz año, aun sabiendo que varias de esas personas no serán felices sólo porque ellas mismas  no lo quieren ser, porque pasarán su año estresadas por cosas sin sentido una y otra vez, se preocupan por cosas que tienen solución, a ti te parece idiota, tiene solución, no deberían preocuparse, pero pasa algo todavía peor con esas personas a las que tanto quieres pero, de alguna manera te parece tonto lo que hacen, se preocupan también por cosas que no tienen arreglo, cosas sin solución les quiebra la cabeza. Y luego que dicen que esto y que lo otro, pero no deberían atarearse la mente con esas cosas, es mejor dejarlas de lado, si no la puedes arreglar estar ahí es perder el tiempo.

Pero ahí estás, escuchando la conversación de tu mamá o tu vecina o las personas con las que estés conviviendo (conviviendo a medias, porque tu no intercedes a menos que sea completa y absolutamente necesario), y dos señoras más, son tres, inevitablemente hay al menos tres señoras conversando.

Aquí es cuando te das cuantas de todas las creencias y costumbres de la gente para año nuevo, tú, en realidad solo tienes la costumbre de comerte doce uvas y pedir doce deseos, en realidad, dudando que se cumplan, pero no puedes negar que te gusta mucho comer uvas, y porque desperdiciar la oportunidad de desear algo mientras te las comes.

Entonces pasa media hora, y no sabes cómo pero alguien ha preguntado por tu lista de propósitos. Y resulta que no tienes nada, aunque todos, fuera de ti que literalmente no has escrito nada, coincidieron en escribir que quieren viajar, que quieren un mejor trabajo, todos quieren tener más dinero para prosperar, pero resulta que ninguno viaja, que ninguno mejora de empleo sino que muchas veces lo pierde, y el que obtiene más dinero no prospera, sino más bien lo malgasta.

Y llega ese momento inevitable en la vida de un hombre, que cada año nuevo no hace sino recordarte que te haces más y más viejo. Y no te queda más que aceptarlo con una sonrisa en el alma.

A uno lo acusan de pesimista, e inevitablemente lo es, pero ante eso no te queda más que desearles a todos un feliz año nuevo.

Y yo, en lo personal y de todo corazón, te deseo a ti, mi querido lector, un año lleno de felicidad, no espero que se cumplan tus propósitos, espero que a lo largo del año vayas por ellos y los cumplas tu mismo, espero que vuestra felicidad sea tan grande como la imaginación.

sábado, 19 de diciembre de 2015

Hacer el amor o tener coito. Pero no las dos.

-Tú no sabes lo que es hacer el amor.

Cuando estaba triste llegue yo, le pregunté lo que tenía y la escuché hablar de estupideces por horas. La consolé, sin darme cuenta ya tenía mi mano sobre su muslo, ella me miró, confusa, en un movimiento igualmente imperceptible    ella aprobó mi acercamiento. La besé en el cuello, ella comenzó a acariciar mi espalda mientras le desabrochaba su blusa azul.

Desde entonces, tuvimos una relación de amigos ante la gente, pero cuando estábamos solos, sin nadie, en lugares cerrados para no hubiese un solo testigo, aunque fuera tan jodidamente discreto como lo es la luna.

Un día, en nuestra faceta de amigos ante la gente, gente desconocida la cual probablemente nunca más veríamos en nuestras vidas, tomé su llavero y tenía seis llaves, esta, dijo, es la llave de la puerta principal, esta; -dijo soltando la llave y tomando otra- es la llave trasera, esta; -dijo mientras repetía el procedimiento de la última la llave, es la llave de la otra puesta principal -la primera pertenecía a la entrada frontal que daba al pateo, y esta, a la puerta delantera de la casa, esta otra; es de la puerta de mi habitación, está es de un cofre donde guardo las cosas de la escuela, y esta última -hizo una pausa y suspiró-, es donde guardo todo aquello que me hace o ha hecho feliz alguna vez.

-Voy a necesitar está llave y está otra -señalé la llave de la puerta trasera de su hogar y la de su alcoba-: para cuando necesite ir y hacerte el amor.

-Tú no sabes lo que es hacer el amor -dijo en tono de rechazo.

-¿Es acaso eso lo crees?

-Sí, para ti no soy más que un objeto sexual -su tono aun era a manera de parecer enojada, pero su mirada reflejaba tristeza.

-Claro que lo sé -y es cierto que jamás lo hemos hecho, ni lo haremos-, pero tú jamás me has comprendido, yo lo dije de esa manera para evitar un léxico ofensivo y degradante, para no decir algo como "cuando tenga ganas de coger" o "cuando te quiera penetrar y tener coito", el amor sin embargo lo conozco, para mí es escribir, y para ti -tome su llavero y jugué un momento con cada una de las llaves, al final me decidí por una-: es este cofre.

Ella bajo la mirada, yo me alejé, y pararon los días y semanas, ahora, a un par de meses de eso puedo decir que no la extraño, que nunca me lamenté por haberle perdido, y que mi vida continuó y continua como si nada, porque para mí era eso, era un acuerdo de sexo ocasional como ella y yo lo decidimos después de la primera vez, nunca extrañé estar con ella a las once de la noche escuchando su día -siempre era yo quién le escuchaba-, no extraño hacerle reír y gemir a las tres de la mañana, y nunca me sentí culpable por como termino, por no volver a recorrer su espalda ni volver a hablarle entre la gente...

¿Eso me hace un mal hombre?


miércoles, 16 de diciembre de 2015

De Alberto: Su probabilidad.

"Los hombres tendemos a sufrir por tonterías."


Alberto es ese tipo de personas increíblemente introvertidas, calladas, descuidadas y con esa tendencia que uno no comprende de distraerse a cada rato, en la escuela siempre está callado, siempre, yendo hacía ninguna parte en ninguno lugar imaginario, pero yendo, cuando llega a casa no hace otra cosa que no sea sentarse frente al televisor y mirarlo por horas y horas y horas.

Alberto me preocupa, él es de una familia pobre, sólo posee un televisor, él cual ya no podrá ver más por un supuesto apagón analógico que se a venido dando en el país hace ya cierto tiempo. Al despertar está mañana su mamá lo vio en el sillón, incluso con su familia es muy reservado, ella lo miro confusa, porque él estaba allí, y el televisor también pero apagado, con la pantalla en negro reflejando la escena de un adolescente sentado sin hacer absolutamente nada en un sillón, y su mamá observando, justo a en el umbral de la sala de estar.

En este momento de la vida qué podrá hacer Alberto, esta puede ser una gran oportunidad para hacer amigos, para salir los viernes en la noche o los sábados o los jueves a andar de loco bastardo vagabundo, para leer los lunes, los martes, los miércoles, los jueves, los viernes y el resto de los días por la mañana, para salir a montar en bicicleta a las seis de la mañana y sentir el frío roce del viento en las mejillas. Para tomar café en su azotea cada amanecer y cada atardecer, para ser rechazado por un par de lindas chicas hasta dar con la correcta, para cambiar su vida a mejores hábitos, entrar a los scouts, conocer la realidad y enojarse con las personas que tengan el mismo estereotipo que él hasta ahora de que no hacen más que vender galletas, de desperdiciar la vida haciendo todo aquello que le parezca emocionante, de cometer locuras e idioteces hasta más no poder, de tocar fondo metiéndose drogas a cada minuto.

Pero no creo que nada de eso ocurra, conociendo a Alberto se va a deprimir, sus padres se partirán el lomo trabajando y el alma viendo el destrozo de su hijo ante tal tontería, su padre no lo llevará a pescar, no saldrán de día de campo los domingos, no, su madre no le contará historias antes de dormir ni se sentará a cenar en la misma mesa que Alberto para platicar sobre su día, no, ellos tomarán jornadas dobles de trabajo para poderle comprar un televisor nuevo a su querido hijo en un par de meses, para lo cual probablemente será tarde, porque para entonces, y espero de todo corazón equivocarme, Alberto ya se allá suicidado una noche de luna llena con insomnio.




martes, 6 de octubre de 2015

Caer de Gota en Gota.

El día está nublado, uno voltea a mirar el cielo y no se puede apreciar el sol, tranquilo, inagotable, esperando su turno de aparecer pacientemente por detrás de las grandes nubes blancas, tan azules como el océano gris después de navidad.

Samuel, como cada tarde a las 7:30, camina hacía su casa, el día es un día perfecto para una caminata, aunque repentinamente todo cambia, un trueno se oye en la distancia y el viento comienza a soplar incesantemente, después el agua comienza a caer con una furia desenfrenada.

Samuel sólo se limita a sonreír, le parece fascinante como algo tan bello como el cielo (ahora no le cabe duda a Samuel que tan emífero puede llegar a ser el universo) puede almacenar tanta ira y esperar al momento exacto (no sabemos exactamente que momento pero el cielo sí) para desencadenarla de una manera brutal y sublime.

Todavía no terminaba el asombro de la furia contenida en cada una de las bellas nubes que hace solamente  cinco minutos habían sido la única compañía y refugio de Samuel, cuando el golpe sólido del granizo azotó en su cabeza descubierta.

Samuel llegó a casa y preparo café.

Pasó la noche junto a la ventana viendo el cielo caer de gota en gota.

martes, 29 de septiembre de 2015

Cada mañana de invierno.

"Existen algunos momentos y ocasiones extrañas en este complejo y difícil asunto que llamamos vida, en que el hombre toma el universo entero por una broma pesada." 


-"Moby Dick"

Despertó, se sentía al borde el abismo, se sentía roto, agonizante e inútil. Se sentía a llorar, su alma se había roto como la tibia de su tía abuela a los ocho años montando bicicleta.

Sólo que era más complicado, porque la tibia por más que rompa nunca sana, en cambio, en el alma, la cara medial del sentimiento más largo que uno posee es frenética, te marca la vida para siempre o un rato, a él, lo haría para siempre.


Como cada mañana de invierno había salido a correr o caminar o quién sabe a qué, hacía bastante frío como para querer seguirlo y averiguar a que se había salido como cada mañana a las 4:30.

Volvió a las cinco, como cada día preparo café y me creía dormida, yo en cambio ya estaba lista para despertar y agradecerle que me haya traído el desayuno, pero no...

Salió nuevamente con una tasa de café y una carta de te amo en el olvido. Al momento decidí levantarme de la cama, todavía desnuda fui a la cocina, la cafetera vacía, ahí, junto a la vida de aquel hombre, también vacía, prontamente me vestí y salí a buscarle, las calles de la cuidad todavía oscuras a media madrugada, el sol aún descansando antes de la línea del oriente tras las montañas.

Cansada de buscar volví a casa, y él no estaba, ni comprendía como pudo irse sin decirme nada, ahora parecía otro hombre, era otro hombre, porque siempre fue espontaneo pero jamás fue más allá de los segundos, siempre su misma rutina desde que lo conozco, despertar, salir a las 4:30, volver a las 5, preparar café, dejar la cafetera andando y hacer el desayuno, dejarlo en la mesa de centro, quitarme la sabana, sentarse al borde de la cama y mirarme desnuda hasta que yo despertara, después de acercarme el desayuno, terminar y hacerme el amor, después bañarse e ir a la facultad, volver, llevarme a pasear por el parque tomados de la mano, platicarme de su día y preguntarme por el mío, volver a casa y hacerme el amor una vez más, después de eso dormir, despertar de nuevo y hacer lo mismo, me quería mucho, o me quiere, no lo sé, lo de hoy si que es extraño, tal vez necesita soledad, hay ocasiones en que un hombre debe replantearse la vida para poder saber lo que está haciendo, para no considerarse inútil e inservible. 

Aunque para él ya era tarde.

Desperté, era yo, yo completamente sola...

lunes, 28 de septiembre de 2015

Mirar hacia atrás, Tocar fondo, Tomar valor y retomar el viaje.

Porque cuando uno mira hacía atrás puede ver todo aquel camino que a recorrido y sentirse orgulloso, también puede avergonzarse o sentirse mal por todo aquello que dejo tirado, por las personas que olvido y por todo aquello que perdió.

Es por eso que los psicólogos recomiendan nunca mirar para atrás, pero no les hagan caso, miren, y vean todo lo que fueron capaces de hacer, de avanzar, miren el camino que les falta por recorrer y siéntanse todavía mejor, porque por más largo que parezca ese camino serán capaces de recorrerlo a paso firme, flaqueando en ocasiones e incluso agonizando aunque sea una exageración, incluso podrán morir varias veces y tocar fondo y quedarse ahí por unos días. Pero tengo la seguridad de que levantarán la vista, respirarán profundo y volverán a ese sendero de fascinación que es la vida y el eterno ir y venir de sus sorpresas.

Miren siempre hacía atrás, algunas cosas dolerán por haberlas dejado ir pero era necesario, vosotros mismos saben que con aquella cosa o persona su vida sería una serie interminable de lamentos a llanto ahogado.


Y cuando se sientan tristes por ello, pueden hacer dos cosas, preferentemente las dos, sentirse felices por tener el valor de haber dejado lo que ya los serviría para continuar en busca de sus camino, y por haber aprovechado al máximo todo aquello que tuviste mientras pudiste aprovecharlo.

Y mirar hacía tu alrededor y ver todo aquello que tienes en este momento y todo aquello que has conseguido, tener por seguro que lo mereces, porque lo mereces, porque trabajaste interminablemente por conseguirlo, y porque es el fruto de todo el esfuerzo que le imprimes a todo lo  que haces en la vida.

Ahora cierra los ojos, respira profundo, toma valor y emprende el viaje, porque esto, es sólo el comienzo.




domingo, 27 de septiembre de 2015

Dilema entre la moral y la moral.

Carlos está en un maldito dilema entre la moral y la moral, o algo similar, claro, esto si lo anterior tiene alguna clase de sentido.

Carlos tiene una novia, Cindy, en realidad no sé si sea o no una linda chica, yo no la conozco, y como he de suponerlo usted tampoco, el problema de Carlos radica en que le gusta (además de su novia), otra muchachita llamada Fryda, Sonia o Belén, aun no estoy seguro de su nombre, pero sé que es uno de esos tres.

El problema, intentando darle sentido a mi oración inicial, entre la moral y la moral radica en lo siguiente:

Su novia lo quiere mucho y él a ella, en este caso la moral digta que no la deje nunca jamás por nada del mundo o del tiempo o del juego de pelota que le encantaba cuando era niño.

Pero también, no obstante a lo anterior, Sonia (llámemosle así) lo trae todo tonto (probablemente así sea naturalmente), van a la misma prepa y él no deja de pensarla, yo también voy aquí y soy amigo de carlistos (así le decimos por un programa de televisión que veaíamos cuando jóvenes, pero en relidad se llama Joel), así que desgraciadamente debo pasar todo el día escuchando su puto dilema de si se queda con su novia o la deja por esta otra muchachita.


Yo le he pedido que por favor no me involucre, le dicho que soy su amigo y como tal no voy a solaparlo sobándole el lomo diciéndole que se tome su tiempo en decidir, como buen amigo hay que hablar con la verdad y lo más al chile que se pueda, esto claro sin llegar a la ofensa, le he dicho las dos opciones que tiene por delante (las únicas dos opciones que a mi parecer existen en una situación similar):

1.- O te quedas con tu novia y de dejas de mamadas, y la tratas como la princesa que ella es (a fin de cuentas toda mujer es la cosa más perfecta que puede existir).

"Si te enamoras de dos mujeres a la vez, quédate con la segunda, porque si amarás lo suficiente a la primera, no te habrías enamorado."

-Algún pensador cuyo nombre he olvidado.


2.- O la dejas y vas con todo con Sonia aunque al final te mande a la chingada, pero la dejas primero, no puedes estar con tu novia al mismo tiempo que lo intentas, para que si no funciona te quedas con ella, lamento tronarte la burbuja, pero lo correcto es decidir.

No he tenido muchas novias en mi vida, pero nunca he dejado a ninguna por otra, porque si estoy con ella es porque la quiero y cuando decidí estar con ella fue para no  dejarla ni decepcionarla jamás, y las pocas veces que yo he terminado la relación lo he hecho de frente, porque no me siento como me sentía, y no le hecho la culpa a ninguno de los dos, con el tiempo uno se da cuenta de que cada experiencia vivida te forma como persona de una manera sublime, o de una forma completamente asquerosa dependiendo como lo tomes.


Carlos no lo entiente, o todavía no decide, es un buen sujeto, pero es un idiota, un gran, gran idota.

Espero y lo piense, pero pronto por que la eternidad se le termina...

sábado, 26 de septiembre de 2015

Dormir Entre Las Sombras.

Estaré bien, si me das un minuto... un hombre tiene un límite, no puedo conseguir una vida si mi corazón no está en ella."

-Oasis.

No puedo conseguir una vida si mi corazón no está en ella...

¿Hasta dónde llega el límite de mi cordura?

Tengo cordura acaso, no puedo soñar, caminar a penas, tengo un hambre irremediable, te traigo ganas, a ti, quiero comerte a ti y a nada más.

No sé ni lo que dijo, tal vez uno o dos de estos días podamos dormir entre las sombras y soñar que soñamos con tener un sueño juntos y despertar y hacerlo realidad.

Por ahora, lo que me queda es morir, morir eternamente por el resto de la eternidad o el infinito o hasta las tres, después resucitar pensando en ti y volver a morir de un pensamiento.

Escucha, la música es cada vez más y más fuerte, uno... dos... tres... y tengo hambre, y quiero comerte a ti una vez más.


Sólo que por favor no me agobies, he decidido que necesito soledad, dame solo un minuto, después de eso estaré listo para comer o fumar o dormir  o morir o cualquier cosa, solo debo de pensar lo que hago, déjame saber que es todo esto porque me estoy perdiendo, me estoy perdiendo, ¿a dónde se ha ido mi cabeza?, las neuronas ya no piensan y mi corazón late por latir.


Necesito algo, tal vez un calcetín marrón y uno verde, pero no lo creo, necesito algo que vaya más allá del mundo, más allá de mí y de los mortales, y del mundo y de mí y de los mortales en el mundo en que yo habito.

Pero no lo sé, no tengo idea de lo que sea...

viernes, 28 de agosto de 2015

Vacío.

Adentro, una cosa terriblemente acabada, no sé que significa esa frase, olviden lo que dije, no lean siquiera:

Vaya, que rebeldes, ahora han seguido leyendo, intentaré que su rebeldía valga la pena, aunque lamento decirles que no tengo una idea clara de lo que lo que hago, no tengo una puta idea en realidad.

Tal vez conforme escriba, quien sabe, estoy al inicio de la hoja, no puedo saber si terminaré hablando de los dinisauros, la era clasiar, o la composición de átomos en el sentido físico de la palabra.

Pero hablemos del título de esta obra, ahora seguro lo saben, la nada es el vacío y también viseversa, cuando escribí vacío estaba pensando que no pensaba, no tenía idea en la cabeza, si para el final de este texto les gusta lo leído me abre dado una lección a mí mismo, lo cual es hacer lo que me gusta sin saber cómo o por qué y sin tener con qué, sólo hacerlo con todo aquello que tengo, y eso es el alma y el deseo de cumplir conmigo mismo en lo mi alma quiere, en este momento quiero escribir y sólo eso, solo, tomando café y está pluma y rayar la libreta de tal manera que al final cuando lo lea me sorprenda, porque eso pasa, uno se lee una semana después de haber escrito y se sorprende, y pinsa que es imposible que esa obra maestra allá salido de su mente (pero salió), a veces uno se inspira del vacío, por eso ustedes hagan lo que les gusta aunque sean una mierda, tan mierda como yo al escribir, porque en ocasiones saldrán cosas que ustedes mismos no se creían capaces de hacer pero lo son...

Quiero un helado, los helados son fríos, en este preciso momento me estoy muriendo de calor, pero como todo el mundo sabe o al menos nadie, yo soy una persona bipolar, no importa que el sol esté a toda su capacidad yo estaré temblando pidiendo un suéter o quizás dos, y quien me lo preste a de enojarse conmigo cuando cinco minutos después este el suelo y me pregunte y lo único que yo le diga sea, <<perdón, tenía calor>>.

Es difícil pensar en un momento así, de hecho, es difícil pensar en todos los momentos, pensar es casi lo más difícil del mundo.

Lo único más difícil que pensar es no pensar.

Ya escucharon a Queen, es una buena banda, tiene el poder de hacer que quieras bailar aunque no lo quieras, aunque lo único que quieras sea escribir o comer helado o jugar fut-bol o practicar karate o leer un libro, irremediablemente hace que quieras bailar, y entonces bailas mientras haces tu trabajo de cada día, mientras te miras al espejo, mientras estudias, mientras haces el amor, esto no es tan malo como suena, si tu novia (como debe ser) es rockera, ella también estará bailando, y bailaran haciendo el amor e incluso podrán disfrutarlo más, debo advertir también que está última actividad es un poco más cansada.

A veces es necesario llorar, ayer, por ejemplo, estaba sentado en el patio trasero de mi casa a las dos de la mañana, como habran adivinado ya, tenía unas cuantas lágrimas rodando en las mejillas, y no eran nada, porque mi corazón también lloraba, las lágrimas del corazón son infinitamente más dolorosas que las propias (esto tiene el sentido aunque el corazón sea propio), yo sabía como debo hacer para consolar un corazón que llora, yo mismo escribí al respecto para no olvidarlo nunca (y nunca lo he olvidado aunque me olvide de todo lo demás), pero en ese momento, estando triste yo también, no sabía si mí compañía le serviría o no de algo, y le sirvió.

Al verme llorar mi corazón comprendió que lo necesitaba, limpió sus lágrimas, cabe resaltar que las lágrimas del corazón son lágrimas con las cuales liberas algo más vital que la sangre o el aire: liberas la vida a cada llanto.

Estaba allí para consolar mi corazón, pero no soporte mi tristeza y él me consoló a mí.

Mi corazón y yo nos queremos mucho...

Ahora me despido, quiero dar las gracias a todos los rebeldes que no hicieron caso a mi petición inicial de no leerme, espero haber hecho que valiera su tiempo la lectura de esto que no sé realmente como salió pero salió.

Buenas noches, días o tardes, no sé a que hora fue que se leyó.

lunes, 17 de agosto de 2015

Del masoquismo: A veces las voces en tu cabeza te quieren ayudar y no las dejas.

Su sonrisa es hermosa, debes tratar de que nunca se borre de su rostro.

Pero bueno, eres un caballero y debes de respetar, así que claro, te le acercas con cautela, y de una manera totalmente respetuosa y caballeresca le preguntas:
-¿Puedo coquetearte?
-Lo siento, -responde ella-, soy una persona sin corazón.
Hay silencio, te dispones a disculparte por el atrevimiento de tu pregunta, pero ella añade:
-Pero sí, puedes coquetearme.

Una persona sin corazón, no seas tonto, probablemente a de romper tu corazón, el tuyo, el que tú sí tienes, pero no es bueno vivir en la tristeza, la felicidad es un estado de animo que no debe faltarnos nunca, y su sonrisa te hace feliz, y vale la pena sufrir a cambio de hacer cosas que realmente te hacen feliz, vale la pena sufrir por una sonrisa suya, por hacerla sonreír, por su sonrisa, por estar con ella aunque sea un rato.

Eres valiente, o tonto o imbécil o valiente, estás dispuesto a morir por algún tiempo, estás dispuesto a que tu corazón ya no sea tuyo, solo para que el tiempo que sigas con vida ella sonría.

Ella es hermosa, ella es un suicidio, un hermoso y emífero suicidio, y es hermosa, escapa, no hará la diferencia, ella igual sonreirá, porque de no ser tu será otro, habrá alguien más que quiera morir por hacerla sonreír, te lo aseguro, ya habrá alguien que lo haga.


(Y no te importa, tú igual vas a intentarlo…).

jueves, 13 de agosto de 2015

Ella distractora...

Ella distractora, él suspira, ella ahí, él también, mirándola, ella sonríe, ella linda, ella distractora, ella belleza, ella única, ella locura, ella perfección, ella abominación, ella existe, ella ahí, ella presente, ella era, ella tiempo, ella cronos, ella relatividad, ella presente… ella pasado, ella futuro, ella pretérito, era copretérito, ella pospretérito.

Ella vida, ella existencia, ella camino, ella recuerdos, ella experiencias, vida, conciertos, café, insomnio, lunes, martes, miércoles, jueves, viernes, sábado, domingo, semana, mes, año, lustro, década, siglo, milenio, eternidad, tiempo, espacio, lugar, existencia, vida final, ella es muerte.

Ella amor, ella suspiro, él suspirando, ella rompe corazones, él corazón queriendo ser roto, ella sonriendo, él perdido, ella miradas, él mirada, ella admirada, ella dolor, él masoquista, ella sufrimiento, ella adrenalina, ella deporte extremo, ella peligro…
Él idiota.

Ella sólido, ella líquido, ella gas, ella plasma, ella condensado de Bose-Einstein, ella materia, ella espacio, ella energía, ella universo.
Ella posibilidad, ella distancia, ella libre, ella esclava, ella cadenas, ella libra, ella caracol hecho de arcilla, ella nube, ella aire, ella nube movida por el viento, ella soplo, ella suspiro, ella cáncer, ella sida, ella enfermedad, ella mortal, ella inmortal, ella celeste, ella estrella fugaz que se detuvo porque mi deseo era verla más tiempo, ella inicio, ella final, ella alfa y omega, ella intermedio, ella beta, gama, ilunga… ella bote, ella iguana, ella sol, él girasol. Ella ocaso, ella alba, ella amanecer; ella cronos, ella temporal, ella para siempre, ella eterna, ella infinito, ella infinidad, ella infarto, ella corazón latente, ella crepúsculo, ella puesta de sol, ella atardecer, ella penumbra, ella tiniebla, ella juego de pelota, ella diosa, él su sacrificio, ella alas, ella viento, ella vuelo, aire, respiración, color, vida, sol, brisa en la cara del enamorado, luna llena en el otoño frío, flor de invierno, primavera, verano, estación; ella caminar descalza, ella nostalgia, ella alegría, ella recuerdo, melancolía, taza de café vacía junto a la cama, amanecer, soledad, sufrir y amanecer sin ella, ella principio, ella compleja, ella musa, ella poeta, ella poesía, ella sueño, ella no existe, ella lo hace, ella frío, ella noviembre, ella frío y calor y sol y sombra y memoria y olvido y dualidad. Ella todo, ella nada, ella más relatividad, ella ella…

“Las mujeres son eso, un viaje, pero jamás de regreso. Un viaje de una sola vuelta al interior del alma, caída sin fin en ese reflejo del yo desintegrado.”
-Erick Quezada.

Quezada: Ella tu delirio ocasional, ella <<te cielo>>, ella locura, ella invención, tu existes para pensarla, para inventarla, una palabra es un nuevo pensamiento, ella otra vez, cada vez la inventas más. Ella chica guapa que estaba fumando, ella el fantasma, ella heterocromía, ella azul, ella marrón, ella ruletas, ella bala entre seso y seso, ella harén de media noche, ella inservible, ella momento, ella soledad, ella taquicardia, ella depresión, ella átomos, ella partículas, ella juego de niños, ella caminante, ella cita favorita, ella Verónica y Rolex y reloj y banca gastada y cuaderno de dibujo y vos Alfonso.

Ella suicidio, ella maga de Oliverio y cigarrillo de Cortázar, ella Chepita de Sabines, Ella Sheccid, ella fuerza, ella valor, ella princesa, ella torpeza, ella distracción de Samuel, ella distracción, ella mi Jenell, ella destino oscuro, ella soledad, ella esquizofrenia…

Benedetti: Ella cielo, ella tierra, ella niebla, ella muchacha, ella techo, ella antejos, ella narices, ella rostro, ella álbum, ella luna, ella tira, ella persecución, ella hijo, ella preso, ella país, ella exilio, ella hombre, ella mirada, ella otro hombre, ella poema, ella otra, ella otros, ella poemas ajenos, ella es la mirada perdida de los trece hombres que miran a alguna parte, ella es la mirada perdida de todos los hombres que miran absortos hacía alguna o ninguna parte.
Ella tregua, ella Laura Avellaneda, ella oscura, ella destino, ella utopía, ella Uruguay, ella exilio, ella tu destino oscuro. Ella tu mujer desnuda y en lo oscuro, ella buena, ella tiniebla.

Ella difícil, ella sencilla, ella compleja, ella transparente, ella alma, ella frío, ella temblor, ella temor, ella terror, ella resplandor, ella Constantinopla, ella Grey, ella Dorian, ella retrato, ella ausencia, ella futuro, ella posibilidad…

Ella dual, ella polar, ella bipolar, ella unipolar, ella tripolar, ella tetrapolar, ella pentapolar… ella polaridad, ella dual, ella dulce, ella amarga, ácida, amable, tonta, linda, mensa, cosa, amor, desprecio, inteligente, tierna, especial y única.
Ella dos, ella siete, ella color, ella sabor, ella olor, ella textura, ella visión, ella sonido, ella pensar, sexto sentido, séptimo, octavo, ella sentido infinito, con ella uno no puede dejar de sentir eternidad de cosas.
Ella matiz, ella positivo, ella negativo, ella ecuación, ella respuesta, ella solución, x es igual a ella, ella es olor, ella comida, ella ladrillo, ella zancudo, ella zapato, ella cucaracha aplastada, ella sugestionabilidad, ella palabras complicadas, ella palabra, ella complicada: ¡ella complicada!

“El de la mujer ausente y la muerte tan trillada.”

Sinué Félix sobre Jaime Sabines.

Sabines: Ella Chepita, ella muerte, ella niña ciega tocando el piano, ella amorosos, hidra, serpientes, gusanos carcomiéndose al dormir, ella lenta, ella amarga, ella animal, ella voz amarga prenatal, presubstancial, ella niña muerte, ella brazos quietos abrazados a la eternidad, ella sombra, ella agua, ella suspiro, ella llanto fracasado, yo no te dijo en donde están tus ojos, tampoco pregunto hacía donde va tu corazón, pregunto, ¿a dónde llego?, ella miss X, ella tía Chofi. Ella horal, ella señal, ella día, ella vieja, ella noche, ella nada, ella llanto fracasado.
Sabines: Ella es musa, muérete querido viejo, tu poeta, ella musa digna de poesía, yo a ella le escribo, ella vida, ella muerte, ella descanso, ella paz, ella recuerdo, ella tu olvido, ella metáfora de la ironía: descansa en paz maldito anciano.

Ella misterio, ella respuestas, ella preguntas jamás formuladas, ella delirio, ella cordura, ella locura…

Ella emífera, ella café, ella poemas, ella poesía, ella poeta, ella escritor, ella libro, ella prosa, ella novela, ella clímax, rincón, rencor, pensamiento, literatura, llanto, ella sentimientos, ella perfección.

“Uno es el reflejo de la música que escucha.”

-Jonh Lennon.

Ella música:
Ella rock: ella Oasis, ella The Beatles, ella Queen, ella Nirvana, ella Zappelin, ella AC/DC, ella Elvis, ella los Rolling, ella Metallica, ella Ramones, ella Sex Pistols, ella The Doors, ella Iron Maiden, ella Scorpions, ella The Who, ella No te va a gustar, ella cuca, ella parvada, ella cuca, ella soda, ella stereo, ella The Strokes, ella Travis, ella Blur.
Ella instrumental: Ella Miller, ella Vivaldi, ella Chaikouski, ella Beethoven, ella Chopin, ella Bach, ella Haydn, ella Dragonetti,  ella Rott.

Ella dualidad, ella blanco, ella gris, ella negro, ella gato, perro, ella persecución llena de ladridos y arañazos, ella bruja, ella gato negro, ella trastos, ella traumas, ella placas, ella droga, ella marihuana, ella heroína, él adicto, él hundido el la adicción, ella adictiva. Ella madera, ella metal, ella carpintera, ella trabajo, ella amor, ella ilusión, ella desconsuelo. Ella perfección, ella locura…

Ella homofobia, ella lesbiana, ella bisexual, ella transexual, ella trío, ella cuarteto, ella orgía, ella perturbación, ella masturbación…

Ella puta, ella virgen, ella golfa, ella ángel, ella demonio, ella sexo, ella oral, ella anal, ella vaginal, ella éxtasis, ella sublime, ella desahogo, ella ausencia, ella soledad, ella…

Ella definición, ella loca, ella decisión, ella, simplemente ella.


Ella… he decidido que ella es indefinible.

lunes, 10 de agosto de 2015

Cartas... A la distracción.

Agosto 6: dos trece a.m.

<<¿Qué tiene de especial desvelarse conmigo?>>, preguntó.

No sabía que decir, era algo que me encantaba, desvelarme con usted era algo sublime, era algo que a decir verdad me encantaba hacer, que me encanta.

Bueno, tal vez para usted no tenga nada de especial porque ya esta acostumbrada (cada vez que se desvela lo hace consigo misma).

Esa fue una idea, pero la descarté de inmediato, porque yo podría acostumbrarme a hacerlo, podría desvelarme con usted mil veces y luego mil más y tres después de eso sólo para continuar así hasta la eternidad o hasta las 7. Entonces no era eso.

¿Qué tiene de especial desvelarse con vos?

Desvelarse con vos es bonito por el simple hecho de estar, por el hecho de la posibilidad, se imagina… vos ahí, pensando en algo, probablemente en un conejo o en café, (también esta la posibilidad de que piense en un conejo café, quién sabe, después de todo su mente es un misterio que no quiero descifrar, porque a mí me gustan los misterios, me gusta saber que hay algo más allá, más allá de ti y de mí y de ambos. Que esté pensando, que esté pensando en mí en este momento (no en el que me lee sino en el que le escribo), o usted pensando, sólo pensando, o no, no piense sino quiere, pero distraída, (porque en algún momento dado de la vida todo el mundo se tiene que distraer), entonces yo le robo una sonrisa, eso en sí ya es especial, eso… la posibilidad de una sonrisa suya.

¿Qué tiene de… (Perdón, sus ojos, los pensé, los pienso, he olvidado la pregunta).

Usted, usted me hace temblar, si algo tiene de especial este desvelo es usted. Su presencia.

O no sé que tenga de especial, solamente sé, que con usted podría desvelarme hoy y todos los días de mi vida o de la suya (y la de ambos).

Agosto 8: doce del día, camino al punta.

La he pensado mucho, también he sonreído demasiado, ya quiero verla, quiero pedirle que sonría cada que usted no se lo espere, y también cuando si lo haga. Quiero que sonría en sí misma, quiero que lo haga por cualquier razón o por mí o por cualquiera, (quiero ser esa razón cualquiera por la cual usted sonría).

Cuando era niño, un maestro de la escuela me pregunto por las siete maravillas del mundo, no las sabía, pero usted tiene dos ojos, una boca, una sonrisa, una nariz, una respiración y una mirada. He hecho cuentas, su faz, la he visto, ahora lo sé, todas esas cosas que usted tiene y yo mencione son las siete maravillas de del mundo (y no sólo del mundo sino también del infinito).

Agosto 9: una a.m. toque de queda.

Me ha sido indiferente, no sé que pasa, no he podido hablarle, no ha hecho más que evitarme, no sé, sólo sé que me gustaría escuchar un… un algo de su bonita voz, algo no tan cortante o evasivo como lo de hoy cada vez que me armaba de valor y le hablaba, que no era fácil, como alguna vez le dije usted me pone muy nervioso, quiero entregarle estas cartas pero no sé como, no me atrevo, llevo todo el día entregándole las primeras dos y no he podido, no es posible que antes de eso ya este escribiendo la tercera. Usted me tiene mal, provoca en mí una sensación que no puedo describir, usted, por favor, no deje de sonreír.

Soy un poco rebelde, hace una hora que debería de estar dormido y mire, aquí estoy, despierto y escribiendo para usted.

Lo de la fogata no era cierto, no es verdad, yo no quiero una clanera, yo la quiero a usted.

Perdón, tampoco me acerqué a desearle las buenas noches, estaba nervioso, pero espero que descanse, espero verla (igual de linda como usted es siempre) en un rato, de hecho creo que debería dormirme de una vez, de lo contario el toque de diana me tomara hecho una mierda y sin descanso.

Agosto 9: nueve treinta y cuatro p.m.

He llegado a escribirle, el campamento me gustó, usted no dejo de evitarme, pero la pude ver, usted me gusta desde el día en que la conocí, ¿recuerda ese día?, fue el veintiocho de febrero, recuerdo aquel día, un intercomunidades, usted y yo en un equipo, dicho equipo se separó y usted quedó en una parte y yo en la otra, eso no importo, yo me cambie de equipo solo para verla y pasar el tiempo cerca de usted, era más fácil hablar entonces, porque usted no sabía que me gustaba, así que podíamos hablar sin que yo me pusiera infinitamente nervioso como ahora, usted se fue temprano o tarde, no sé, lo único que recuerdo es, que el primero de marzo al despertar, cuando fui a formación usted no estaba.

Perdón por las cartas hace un rato, eran solamente las dos primeras, porque esas, desde que iba al campa las tuve en el bolsillo, queriendo entregárselas pero no pudiendo, se mojaron, se mojaron mucho, el agua estaba agradable, cuando se las entregue ya estaban arruinadas, no se las entregue en sí porque aun se pudieran leer (aunque espero y sí cuando se sequen), sino como símbolo de que… (Perdón, omitiré el significado, prometo decírselo alguna vez).


No pude dejar de mirarte, eres muy linda, perdona mis modales, en todo esto no te he preguntado cómo estás. Espero que te encuentres bien, y que te encuentres sonriendo.

domingo, 9 de agosto de 2015

Mi propia idea de un diccionario.

Estoy irremediablemente jodido, peor que jodido, estoy extrañándote irremediablemente.

-Amador González

He decidido aprender palabras, palabras importantes, de esas que la gente debe usar o debería o usa o qué se yo, palabras que al oírlas iré apuntando en papel para no olvidarlas, que planeo subrayar cuando este leyendo o escribiendo y tal vez más adelante averiguar lo que quieren decir y lo que no. Lo que significan para mí, las palabras son esenciales en la vida (anhelo, me vino a la mente, cuando piensas así una palabra quiere decir que tienes que ver más allá, te quieres decir algo a ti mismo, no sabes que es, pero es algo…), palabras como viento o nubes, o aire o limón o mierda.

También hay frases que existen y me gustan mucho, algunas son explicitas o perfectas, pues esas son y siempre lo serán, pero hay otras, que a mi parecer tienen oculto algo más allá, o que aunque son perfectas se pueden complementar con alguna otra, de esas también pienso escribir:

Emífero: De lo brutal, lo sublime, lo hermoso, (tu mirada me pierde, me tiene loco, es la cosa más hermosa que existe, es brutal, puede desgarrarme el alma de una forma tan jodidamente bella que no quiero dejar de desangrar aunque me muera) mortal (tengo tanta mortalidad hacía ti, hacía tus ojos, hacía tu boca, tu sonrisa… toda tú eres una emífera mujer ahora que lo pienso). Concluyendo, lo emífero es todo aquello jodidamente bello, aquello que piensas y te hace temblar.

Tinta y Papel: Lienzo en blanco para un escritor, de ser uno bueno, también es la segunda vida de un árbol, la tinta y el papel no sólo son la vida de un objeto, sino la también son la inmortalidad de otro, la inmortalidad del alma de un poeta. Y tú, que eres músico, toma tu guitarra y canta, porque voz y tus notas son tu tinta y tu papel.

Palabras: Irónicamente he de definirla con palabras; son un arma, un veneno, una cura, una muerte, mortales; sabiéndolas usar son consuelo y vida. Si no se sabe, son trauma y muerte.

Agua: Vida, manantial, oasis, río, mar, río, agua; el agua suele fluir en los ríos, el agua es transparente, el agua es la metáfora más cercana al alma que conozco, si la cuidas quedara cristalina y será transparente, si la descuidas, no la sabes usar o la maltratas, si no la compartes con tus seres queridos se ensucia, y se queda estancada.

Caer: Tocar fondo, tirarte en la cama noche tras noche y llorar a grito ahogado en la almohada. // Oportunidad para resurgir de las cenizas.

Quererte: Inevitable.

…: Posibilidad… (Ejemplo: Ahora, no dejo de pensar en que tiene de especial aquel desvelo… (posibilidad, y tal vez el pensamiento correcto sería que es lo que no tiene de especial, porque aquel desvelo era sublime, pero de eso, de eso escribiré luego, porque ahora esto es un diccionario y como tal exige la seriedad que yo no tengo)).

Obligaciones, definición de Mario Moreno Cantinflas: La primera obligación del hombre es ser feliz, la segunda es, hacer feliz a los demás.

Conocer: Ir más allá, entrar y penetrar hasta lo más profundo, hasta la parte más recóndita del alma, hasta donde se encuentran escondidos los peores pensamientos, sentimientos, traumas y vicios de una persona, conocerla como debe de conocerse uno mismo, y a pesar de saber todo aquello que tiene oculto, no abandonarla.

Locura es sinónimo de perfección: “La verdadera perfección tiene que ser imperfecta” –Oasis.

Ella: Gran y emífera definición, la escribiré por ahí algún día…

viernes, 7 de agosto de 2015

Samuel: Su Distracción.

“Todavía creo que nuestro mejor dialogo a sido con la mirada.”

-Mario Benedetti.

Ayer, Samuel pensaba en... (Perdón, lo olvidé… probablemente pensaba en la nada), pensaba en algo, las personas acostumbran pensar en cosas sin importancia.
Pero en realidad ya no importaba, lo que Samuel pensaba ayer ya forma parte del ayer, del tiempo que no hace más que marcar nuestro presente, y que con cada vivencia que nos dio fue formando poco a poco una parte de nuestra personalidad, quizás lo que Samuel pensó ayer era demasiado importante, por eso no le importo, porque su mente lo guardo en el sub-consiente, porque a diferencia de la parte que podemos dominar el sub-consiente no olvida nada aunque lo haga.

Hoy, Samuel quiere escribir, no es muy bueno, a decir verdad es terrible haciendo eso (tanto así, que cuando escribe habla de sí mismo en tercera persona bajo el nombre de Samuel), pero hace tiempo conoció a una linda joven de cabellos rizados, a ella le gusta leer, a ella le gusta leer con los marrones ojos que tienen tonto a Samuel.

No habla, teme, teme que al hablarle ella lo ignore o lo mande a la chingada, pero aun así a decidido hablarle, ir a ella con un poema y una carta y un chocolate y hablarle aunque suene tonto (y así va a sonar, porque Samuel no es muy bueno para hablar, siempre que lo hace termina diciendo incoherencias).

Un día le habló, era de noche, había fogata, él la miraba… la miraba, la contemplaba igual que un fanático de la pintura a un Picasso, un escritor un tintero y un pintor su lienzo en blanco: perdidamente.

Fue la única noche en que le habló… (Perdón, una vez más lo olvidé.) Samuel está un poco distraído, no deja de pensar en aquella joven de emífera mirada y ojos cafés (¡cafés maldita sea!, con lo adictos que somos al café).

Pensar en ella lo distrae, ya no sabe lo que escribe, lo que piensa, ya no sabe nada, ya no sabe…
Pensar en ella…
Lo distrae…

-Sólo sé que no sé nada. –Estaba distraído, Samuel podría jurar que Sócrates había soñado con está linda mujer de ojos risueños y mirada tierna. Despertó distraído, Sócrates, el famoso y antiguo sabio y filósofo griego no sabía nada. Definitivamente estaba tan distraído como lo está el ahora (una mujer es mortal, puede distraer a cualquiera en cuestión de segundos o incluso antes).

(De las cosas emíferas:
Ella…
La distracción de Samuel…).

Le habló, por así decirlo, porque en realidad ella habló primero, Samuel había hecho o dicho o hecho alguna tontería, ella rió y lo había insultado, por así decirlo, era de esas veces que sólo se dicen para seguir con el relajo, cuando ella había dicho lo que dijo, entonces fue cuando él le habló.

(Perdón, el mundo da vueltas, Samuel está mareado, no se concentra, ya no recuerda que siguió).

Pero en esencia hablaron de puras tonterías, de cómo el cangrejo camina de lado y no de reversa como dicen todos, de que no es inmortal, de que su color rojo se debe a que se la vive enamorado de… y entre tantas y tantas bromas y tonterías a Samuel le gustaron algunas cosas; su voz, con ella podía ser él mismo, sus ojos, el desinterés que su mirada le hacía tener hacía el resto del mundo, su sonrisa, a Samuel le gustó estar ahí, ahí, con ella.

-Ayer estaba comiendo galones de marihuana y un perro me atacó y se llevo todo mi cereal. Así que para recuperar a mi hija (que por cierto es adoptada), tuve que vender el resto del ganado que tenía en la isla en la que naufragué hace mucho tiempo en medio del desierto ardiente de la Antártida.
>>La próxima vez que mi hija se ausente para ir a pescar en la sabana de Alaska por miedo a morir de calor y no capture ni un jabalí, en lugar de ir a buscarla a las montañas de Uruguay , usaré el dinero que salga de la venta del ganado de humanos bebé extraterrestres  para visitar a mi tío el golfo en México –decía Samuel muy decido, incluso parecía que creía que aquello tenia sentido, él sabía que eran tonterías, pero estaba decidido a hacerla sonreír (y lo logro).


Tonterías, de eso hablaron con palabras, pero Samuel (perdón, está pensando en su mirada, sigue un poco distraído y no la quiere dejar de pensar jamás) no recuerda lo que se dijeron entre miradas.




miércoles, 5 de agosto de 2015

Esta cosa llamada amor

Me siento vivo,
Estoy contigo amor y me siento vivo,
Contigo puedo surcar el cielo como las aves que vuelan aun sin saber por qué.
Te quiero, te quiero, y cada que beso tus labios, me hacen flotar,
Flotar por toda la maldita eternidad que vos bendices.
Te esperé miles de años para que llegaras a volarme la cabeza,
Y lo haces con cada beso,
Me haces estallar, te quiero; aunque me mates.
Podría morir por ti miles de veces;
Si puedo vivir un segundo contigo.

Estoy ardiendo a través de los cielos.
Estoy fuera de control,
Me haces volar amor, me haces arder,
Y volar en llamas.
Mi alma se quema por ti; te quiero tanto.
Aun cuando anclas mis pies a la tierra,
cuando me haces morir sepultado en la desdicha de tu ausencia.

Estoy flotando en el éxtasis.
Soy tu maquina sexual lista para trabajar.
Si quieres pasar un buen rato solo llámame y esteré contigo.

Has roto mi corazón y ahora me dejas,
Pero no te alejes,
Pues tú no sabes lo que significa para mí el que tú te vayas.
Te quiero aquí amor, aquí conmigo,
Quiero tenerte cerca y susurrar en tu oído canciones de aves que jamás han cantado;
Y que temen volar.
Quiero lanzar piedras al mar y decirte que te quiero en mil suspiros
Quiero estar ahí cuando envejezcas,
Para decirte cuanto te sigo amando,
Te sigo amando, amor, te sigo amando…
Pero te has ido,
Me has roto el corazón, amor, y me has dejado en el  fracaso.
Me esfuerzo por salir, pero es reconfortante,
Tú no estás, y el dolor es un buen lugar para vivir cuando estás muerto;
Como yo sin ti.
¿Alguna vez tú me lloraste?
No puedo dejar de quererte, amor, no puedo dejar de quererte.

Alguien quiere hacerme llorar (ojalá me hicieras llorar, eso significaría que estás conmigo)
Pero yo no quiero morir llorando,
No quiero morir ni vivir haciendo eso.
Quiero morir contigo, contigo amor quiero morir ahora y siempre.
Morir a tu lado es una forma celestial de morir.
Morir contigo es la perfección en llamas cada que cae una tormenta,
Tú eras la fogata que me mantenía a flote durante las frías noches de invierno.
Ahora el invierno llega y no te tengo; el calor y mi alma se pierden en la inmensidad.

Cada mañana al despertar me muero un poco,
Muero un poco amor, me muero un poco,
Y cada vez que te pienso no hago más que morir sin renacer,
Sino que muero y muero por siempre,
Y me quedo tirando en suelo mental en que te pienso, sin haber barrido por un tiempo
Lo sé, amor, sé que muero porque no estás, pero cuando estabas también moría,
(Una muerte diferente, porque al estar  morir es tan lindo que lo hacía cada mañana al despertar).

Me siento morir porque me muero y muero más y más que eso.

Todos los días trabajo,
Llego a casa y trabajo duro hasta que me duelen los huesos de trabajar y morir durante el día,
Todas las noches caigo de rodillas y me pongo a rezar y le pido a Dios que me acompañe en la vida en que cada día me muero un poco más.
Él lo hace, él está ahí y me acompaña,
Pero todos quieren hacerme caer a cada día,
A cada vida
Y cada vida caigo inevitablemente.

Me da fiebre y escalofríos,
Creo que esta cosa se llama amor y me hace temblar.

martes, 4 de agosto de 2015

Rally-Velada Zalihui

"甚至沒有靈魂而去,至於會心臟。"

(Ni siquiera el alma llegará tan lejos como lo hará el corazón.)

-Filosofo chino.

Zalihui: Palabra náhuatl que significa unión.

Clan: Sección scout que viste camisola roja y va de 18 a 22 años.
Comunidad caminante: Sección scout que viste camisola azul y va de los 15 a los 17 años.
Tropa: Sección scout que viste de camisola verde y va de los 11 a los 14 años.
Scouter: Adulto responsable a cargo de cada sección.


Desperté, me esperaba un buen día, cada año el grupo 31 hace un rally velada campamento llamado zalihui, es el tercero al que voy, los dos primeros acabé siendo una mierda, es un buen campamento, me gusta ir, hacemos cosas que realmente vale la pena hacer, que te cuestan trabajo, que cuando las haces te duele hasta los huesos, que el  alma no puede dejar de sufrir pero es adicta y no quiere tampoco parar, que cuando lo haces dices: es increíble, lo logré.

Legue al parque a las dos cuarenta y tres de la tarde, el registro debía comenzar a las tres, ah, pero el registro, las tres, la puntualidad y el tiempo, qué más da, somos scouts, que el registro comience más tarde, a las cuatro, después de todo nos iríamos el día siguiente, cual era la urgencia de lesionarse tan temprano, que más da si seguíamos vivos una hora más de lo esperado.

Una hermosa pista comando de inicio, cuerdas atadas a  centímetros del piso para pasar por debajo en pecho tierra, cuando lo hice, a toda velocidad, el staff comenzó a arrogar agua estancada sobre mí, ya lo habían hecho en la tierra lodosa en que me arrastraba y se arrastrarían más y más personas, seguí avanzando, mientras más tiempo tardará en pasar esa parte más agua tirarían sobre mí, yo antes estuve en el 31, Bernardo y yo somos amigos, a ambos nos gustan las actividades de índole física y nos hacemos que nos cueste trabajo o nos motivamos haciendo que así sea para el otro, por lo cual yo de por sí me mojaría más, Bernardo me iba mojar, ahora el era staff y yo me arrastraba en el lodo. Lo hice bien, rápido, en el pecho tierra rebasé a dos personas, me sentía bien, tenía lodo en la cara y mi cabello se había puesto rígido y duro por el barro. La pista comando continuó con una cuerda lisa (después de todo era una pista que diseñó el 31, y el 31 siempre pone cuerda lisa, de lo contrarío, no importa quién diga qué, la pista no es de ese grupo), bastante baja, medía (por mucho) 3 metros, subí la cuerda, la habían atado a la rama de un árbol, seguí adelante, abría que dar el paso del… olvide el nombre de dicha actividad, pero hay dos cuerdas atadas en paralelo de forma horizontal, y uno debe de pisar la cuerda inferior con los pies, mientras con las manos se toma de la de arriba y comienza a caminar en esa posición de un extremo a otro, cuando subí, Bernardo no dejaba de mover la cuerda de abajo, era divertido, estuve a punto de caer un par veces, pero llegue y continué hasta el paso del mono (una sola cuerda en horizontal, en la que uno debe de colgarse de cabeza con manos y pies y avanzar (preferiblemente sin caer)), después de eso el pasó del sargento (una cuerda igual que la anterior, sólo que esta se pasa boca abajo y con el pecho y la panza en la cuerda, normalmente la pierna derecha (o la izquierda para quien es surdo), va enganchada en la cuerda y la pierna sobrante en el aire, suspendida, probablemente con frío, en el vacío, sola; para dar equilibrio a la persona. La cuerda estaba casi por los suelos, bajaba mucho, no estaba en buena altura y dicho paso me lo salté, no lo hice, y fui hasta el fin de la pista comando, la cual terminaba con una vuelta de campana, Robert (clanero del 31, organizador y miembro del staff) me preguntó al llegar: ¿sabes dar la vuelta de campana al revés? En realidad nunca lo había intentado, pero ya estaba ahí, la cuerda estaba puesta solo para tomarla con las manos y saltar y dar la vuelta, así que lo intenté, tomé impulsó y salté hacía arriba tratando de dar vuelta hacía atrás tomado de la cuerda, el impulso se terminaba y yo iba a medio camino, pero hice fuerza, y apoyándome con la cuerda lo logré, y Robert dijo: que genial, lastima que la vuelta de campana es hacía el frente, así que ya hazla bien y terminas.
Y la hice bien…
Y terminé la pista.

Me duele el cuerpo, mucho, ese campamento estupendo, esperaba algo bueno, el 31 siempre me hace sufrir en ese rally, me gusta sufrir así, es un dolor único, cuando todo te duele por haber hecho algo que quieres siempre es mejor que estar descansando y sin dolor queriendo haber algo pero no por miedo a lastimarte. En la vida el dolor es necesario, necesario e inevitable, hay que aprender a vivir con él y gozarlo, porque no cualquiera lo consigue por haber luchado y nosotros sí.
Yo vendo chocolates, es mi actividad económica, sirve de mucho. Debo decir que no soy pobre, sobrevivo sin dinero, puedo comer y esas cosas, pero los campamentos, el traslado de un lugar a otro y todo eso cuesta. Para eso no me ajusta, el zalihui, por ejemplo, costo $90, y yo soy pobre, jamás hubiese tenido para pagar aquello, mis hobbys son caros. Pero vendo chocolates, con eso pague. Me gusta vender, porque con eso saco para ir a este tipo de actividades. Me gustan mucho. Además vendiendo conozco personas. Dieron un tiempo para levantar las casas de campaña. Yo no tengo, mi hermana tiene una, pero la verdad tenia mucha flojera de cargarla y la deje en casa, después de todo era una velada, casi no duermo (casi no dormí, casi no dormiría, casi no dormiré, casi no duermo). Así, que mientras todos ponían sus casas yo me puse a vender chocolates, tenía dos cajas, eran alrededor de 30 chocolates, se acabaron, fue rápido, era como de –dame chocolate- y no me quedaba más opción que responder, lo más bonito o insultantemente posible (de pendiendo si era una persona a la que conocía y con la que si me llevaba o no): –Ya no hay-. Así de rápido se terminaron, tanto que ni lo noté, normalmente yo me como dos, pero esta vez no alcance ni siquiera uno, no me había dado cuenta de que se me terminaban y los vendí y no aparté un mísero chocolate para comer cuando quisiera. Bueno, sólo podía resignarme y fue lo que hice, no m costó trabajo, fui con unas caminantes del 26 y tenían galletas y les ayudé a comerlas, (así soy yo, muy amable, ayudo a las personas en cosas importantes como comer lo que tienen y así (como la cena de Amador, pero eso también viene más adelante), no cabe duda de que soy una persona muy amable y caritativa). Mi scouter fue, tenía una moneda de $20 pesos conmemorativa de Octavio Paz, tenía, porque ahora ya es mía, ahora tengo 6 de esas monedas.

La temática del campamento fue china, parece ser una cultura bastante interesante, el sábado, al llamar a formación para hacer los equipos (porque este rally se hace en equipos, como todos a los que he ido), me enteré de lo que significan los animales en el calendario chino, cuando Buda llamo a todos los animales que existen, decidió premiar a los primeros doce que llegaron primero dándoles a cada uno un mes en el año. Al parecer el gato fue uno de esos doce, a los equipos nos dieron el nombre de algunos de esos animales, mi equipo se llamo gato así, que fue uno.

El rally consistió en ir de base en base por el parque haciendo los diferentes retos que el staff a cargo de dicha base te iba a poner. Nos dieron 5 yuanes (el yuan, es la moneda nacional china), y 2 huevos, y en cada estación se ganarían o perderían yuanes dependiendo de si se cumplía o no la prueba, los 2 huevos al final del evento, si se mantenían enteros, serían equivalentes a no sé cuantos puntos extras para el equipo que los haya conservado intactos (mi equipo lo logró, hubo un par de equipos que sólo lograron conservar un huevo, y el resto no tenía uno sólo).

La primera estación a la que fuimos fue una variación de buda (en los scouts, el juego de buda consiste en que, dos equipos se enfrentan entre sí, cada equipo elige un buda, el cual debe sentarse en el suelo en la posición que elija y no moverse, el resto del equipo debe protegerlo para que el equipo rival no se lo lleve, y traer su buda hasta donde está inicialmente el suyo, es como el juego de roba la bandera pero con personas), que consistía en elegir a alguien, el cual se sentaría, y como en la base estaba solo nuestro equipo, la variable consistía, en que resto del equipo debíamos de transportar a nuestro buda a cierto punto, como dije el buda no se puede mover ni cambiar la posición, el equipo era de seis personas, la parte difícil radicaba en que, las cinco sobrantes, no podíamos usar los pies para mover al buda, de buda se puso la única mujer de nuestro equipo, una linda clanera del grupo 13 (tal vez escribir que era linda y clanera y del grupo 13 es opcional, pero en nada afecta escribirlo, después de todo, era linda y clanera y del grupo 13).
Cuando comenzamos, teníamos 2  minutos para hacer el recorrido, y la prueba valía dos yuanes, en realidad suena difícil, y lo fue, sobre todo idear la forma de movernos sin usar las piernas. Cuando lo hicimos, ya habíamos perdido algún tiempo, pero aún así lo hicimos, y lo hicimos bien, lastima que el tiempo se termino y no alcanzamos, perdimos dos yuanes o algo así; porque el staff nos ofreció un mucho o mucho: hacerlo de nuevo, y si perdíamos, perdíamos cuatro, pero si ganábamos, no sólo no perderíamos nada, sino que también nos daría cuatro yuanes extra, con la variable de que esta vez sólo tendríamos un minuto para hacerlo y debíamos cambiar al buda, lo pensamos un poco, pero con la técnica ya pensada y un buda que fuera ligero creímos que sería fácil, regresamos al inicio un par de veces porque, según el staff, habíamos usado los pies para impulsarnos, yo fui el buda, y mi equipo me llevo a donde debía en cuestión de 22 segundos (que fue el tiempo que tuvimos desde que nos regreso por segunda vez), así que teníamos 9 yuanes.

Estoy cansado, muerto, vivo, siempre que muero de esta manera tan increíblemente jodida me siento tan bien, esto sólo sucede después de hacer cosas que valieron la pena, después de haber luchado con todo el corazón para lograr hacer las cosas que realmente quieres y te gusta hacer, mueres te sientes acabado, y todo a tu alrededor no importa, sólo importa que con cada movimiento cada músculo de tu cuerpo duele un poco más, y te dan unas ganas de quedarte quieto para siempre con el único fin de que no duela, pero no te puedes quedar quieto, por que eres ese tipo de persona que no deja  de hacer aquello que debe hacer, que no deja nunca de esforzarse por cumplir sus metas.

Así que llegamos con Bernardo, su base era fácil para mi equipo, y eso era bueno, porque se trataba de cabuyería, en la cabuyería soy un desastre, peor que eso, el nudo simple me sale (pero la verdad es que hasta ese me cuesta trabajo). Era sencilla, todo lo que se tenía que hacer era caminar de un punto a otro, no eran más de 15 metros, sólo que en cada paso se debía de hacer un nudo diferente y decir su nombre y para que se usa. Ahora que lo pienso el ballestrinque si me sale, cuando lo intenté no me salió, pero normalmente sí puedo hacerlo. Debo decir que si ganamos otro par de yuanes yo no tuve nada que ver, es una suerte que me haya tocado ese equipo, no sólo por saber nudos, en realidad casi todos lo scout dominan la cabuyería, claramente yo soy la linda excepción, sino también porque eran geniales, nos pasamos todo el rally platicando y jugando entre nosotros y se hizo más fácil todo, como siempre, las cosas son más fáciles cuando con quienes las haces te llevas bien y te agradan.
Yo no tenía piola, así que para los nudos había usado la agujeta de mi zapato.
Y ya teníamos 11 yuanes.
La siguiente bese se trabada de arrogar los zapatos y hacerlos pasar a través de un par de  hula-hula que estaban colgantes desde la rama de una árbol, y que con cada zapatazo se movía mucho. Como ya dije, éramos seis en el equipo, y cada uno usaba dos zapatos (no sé, pero las personas suelen usar 2 zapatos comúnmente, uno para cada pie), la bese valía dos yuanes si perdíamos, dos si metíamos 5, tres si metíamos 10, y cuatro si metíamos 11 o 12. Aquí también perdimos. Y la staff nos dio una segunda ronda con la misma apuesta, si ganábamos nos daba las mismas monedas que había dicho y nosotros no le íbamos a pagar nada, y si perdíamos pagamos dos yuanes, cuando quedaban tres zapatos por aventar y llevábamos 5 adentro, nos dijo que si no metíamos ninguno le pagamos tres yuanes, y que si metíamos todos (ocho totales) nos pagaba tres, aceptamos, y los quienes faltaban de tirar los anotaron todos.
En ese momento los yuanes que teníamos eran 14.

Cuando llegamos a la siguiente estación fue la más cara (y a decir verdad estuvo bastante fácil), valía cuatro yuanes y todo lo que teníamos que hacer era tocar la campana que estaba puesta arriba de un árbol el cual tenía el tronco grueso y no se podía escalar en sí. Pero subir fue fácil, subí en los hombros de alguien, más o menos de mi misma estatura, y éste subió en una roca y así llegue (estirando las manos), a la rama mas baja del árbol, toque la campana y baje, la bajada fue aún más sencilla, solo salté, llegue al piso en caída libre desde una altura de alrededor 2.5 Alonsos, recuerdo que con la caída me tronaron las rodillas, estuve a punto de morir, pero tenía los músculos calientes y no me dolió, ahora no puedo ni caminar pero ese día no me dolió. 18 yuanes.

Estoy jodido, me duele el mundo, me duele hasta respirar, mis piernas arden, estoy más que jodido físicamente hablando, no puedo articular una sola palabra sin que me duela la mandíbula, estoy tan jodido que si tuviera que volver a ir iría sin pensar y volvería a sufrir como sufrir.

Perdimos un yuan, en la base de Karla, debíamos hacer telaraña (una serie de cuerdas atadas y enredadas entre sí, de las cuales debemos pasar caminando por arriba (quiero decir en los espacios que había entre una y otra) de ellas sin tocarlas), pecho tierra, un salto del tigre, paso del mono y una pirámide en un tiempo límite de un minuto, la base en sí valía dos, si avanzabas en la prueba y perdías sólo te cobraba uno. Nos falto la pirámide, pagamos un yuan.
Y nos quedaron 17 yuanes.

Cenamos, a Amador (clanero del 51, yo también estoy en ese grupo, pero yo soy un lindo y sensual caminante y él no), no le gusto su comida y le ayude con ella. ¡Claro!, para eso estamos los scouts, para ayudarnos en tiempos de crisis y necesidad. ¡Claro!

Lo que siguió fueron actividades y apuestas entre equipos, a un equipo le ganamos dos yuanes en círculo de retos y a otro 3 en huaro. Fue divertido y terminamos con 22 yuanes.

La fogata fue hermosa, con el fuego, y las canciones y la ambientación, y mongol casi quemándose a media canción y valiéndole madre y seguir cantando, y yo cantando que yo quiero una clanera, pero una así de buena (perdón, esa canción me tiene traumado, está muy padre, una vez unos scouters de tropa casi me matan por haberla cantado en un inter-tropas, pero el campa era de comini-clan (así dijo yo comunidad y clan cuando están juntos, déjenme) y si se podía cantar) creo que la invitaré al cine.


Y pues ganamos. Llegue a mi casa y todo era perfecto. Me fui a dormir y todo era perfecto. Desperté y todo era dolor. Todo; menos mi espíritu.

jueves, 30 de julio de 2015

El Águila Sangrienta



Después de esto yo sabía lo que venía, los dioses, jamás me atrevería a ofender a los dioses.
Yo no sé porque pronuncié aquello. No elegí las palabras… sólo… las dije.
Como si los dioses las hubiesen elegido para mí y mi destino. Ahora no me queda más que aceptarlo como buen guerrero. Como todo aquel que merece la gloria, porque el castigo que me sobreviene muchos lo ven como una tortura, pero yo lo veo como una verdadera oportunidad de mostrar la fuerza de mi alma. No los voy a engañar, preferiría mil veces no tener que pasar por esto, pero ahora está escrito, fue escrito con la única tinta que es imposible borrar: la tinta de los dioses.

Una botella de cerveza de rompe en mi cabeza, me desangra un poco, podría voltear y luchar con el maldito que lo hizo, pero sé que sólo fue un aviso, ahora tenía que bajar la cabeza y esperar mi apresamiento.
Llegamos al calabozo, unas cadenas comienzan a atraparme de manos y pies, mientras yo miro en silencio (no puedo hacer más, podría, después de todo soy el guerrero más fuerte de toda la raza vikinga en este reino, pero no, porque mis palabras, que a menudo son peor que las acciones –porque las palabras pueden dejar heridas de por vida, traumas verdaderamente grandes, fueron las causantes de todo esto).
Estoy preso, la puerta comienza a cerrarse lentamente, apuesto a que lo hacen a propósito, cerrar la puesta lentamente para que a cada centímetro anhele más y más mi libertad, y precisamente porque la anhelo no he de escapar, porque la libertad está en el alma, y mi alma no la tiene, la única forma de recuperarla será haciendo frente a aquello que me he ganado.
Los días pasan lentamente, uno, dos, tres, otra vez tres, maldita sea este día no sé acaba… cuatro, cuatro, cada día es más largo que el anterior…
Por fin, éste es mi séptimo día, no he comido, lo he soportado, no he hablado con nadie, está prohibido, debemos permanecer callados durante el encierro, después de todo no ha sido tan malo, durante esta semana he hablado conmigo mismo, me he conocido más incluso de lo que pude conocerme en toda mi vida. Cuando todo esto  inicio yo ya había decidido recibir mi castigo, pero tenía duda, me preguntaba porque los dioses habían elegido esto para mí, y si eran capaces de mandarme a lo que va a pasar mañana (porque lo de mañana a esta hora es la peor de todas las torturas que se practiquen este mundo. Pero vale la pena por toda la gloria del mundo que está por venir).

Escucho unos pasos, afuera, alguien viene, entra. Es una cara conocida, pone junto a mí el cráneo de algún difunto que murió con la misma tortura que me espera y que ahora solo están sus huesos. Yo sé que ahí están las llaves las cadenas que tengo apresándome manos y pies y de la puerta, ésta es la parte más difícil de todo, cuando sabes todo el dolor que te espera y tienes la llave al alcance de tu mano, durante veinticuatro horas, que el reloj de arena que colocó en suelo hace cinco segundos ha comenzado a contar, cuando sabes que probablemente no podrás superar lo que está preparado para ti más allá de ese lapso.

-Lamento que pases por esto –comenzó a hablar-, el tío Floki me ha hablado del castigo, sé que no puedes hablar conmigo, y que mañana no puedes gritar, que si lo haces no podrás entrar en el Valhalla, tampoco lo harás si me hablas hoy o si hubieses comido cualquier cosa antes de ahora desde que fuiste apresado. Pero eso no me prohibe hablarte a mí. Tampoco te prohibe escuchar. He pedido a los custodios un par de minutos contigo, los convencí, con el argumento de que si te hacía hablar jamás conocerías la gloria del Valhalla.
>>Prometo que voy a cuidar de mamá. Prometo también que en cada batalla y cada muerto que ose profanar el pueblo de los dioses que somos nosotros lo será en tu nombre, ahora que no estás yo soy el guerrero más imponente de estos tiempos, el más respetado.
>>Todo el respeto que yo reciba será gracias a ti. Y también será en vuestro honor –mi hijo se fue, yo me quedé aquí. Con las lágrimas rodándome por las mejillas.

El ejército con el que combatí tan épicas y memorables batallas entró por la puerta que minutos antes, marcaba la marcha de mi hijo. Trajo consigo un banquete digno del más poderoso rey, tal y como dicta la tradición ellos se marcaron, y yo comí y bebí asta hartarme y más todavía; al grado de quedarme dormido con un pedazo de pavo en la boca abierta.

Dormí demasiado, más de medio día, el reloj de arena se ha consumido, pensé que anoche tendría insomnio por lo que pasará, según mis cálculos hechos al ver la arena del reloj, en ocho horas.
Ahora las horas se consumen aun más lentamente que los días. Pueden ustedes hacer sus propias cuantas, cada segundo es una eternidad, pero el tiempo no es directamente proporcional, en un minuto caben cien eternidades y en una hora infinidad de infinitos, porque cada  grano de arena es un mundo que pasa afuera y yo me quedo aquí.

Falta una hora, todo mi cuerpo ha comenzado a temblar, creo que debo ir quitándome estas cadenas, porque si espero más estaré temblando tanto que no podré insertar la llave en donde va.

Mis nervios crecen cada vez más, el reloj se consume se consume cada vez menos. Mis rodillas tiemblan, mi corazón hace lo mismo, mi alma jamás estuvo tan excitada y  asustada al mismo tiempo, tengo tanta valentía y determinación dentro de mí que no puedo dejar de temblar ni por un segundo, o mejor dicho, ni por una eternidad.

El último grano de arena cae del reloj, ahora ya no sé lo que es peor, la agonía y la desesperación que me traía toda esa intriga del por venir y esperar que el lapso se cumpliera, o eso, precisamente que se cumpliera.

La llave comienza a girar, he comenzado a empujar la puerta, creo que ella también está temblando. Doy unos pasos, frente a mí hay dos caminos: el que debo seguir, y el de escapar. No he mentir, por una eternidad la idea de tomar el segundo camino se vio bastante tentadora, lo juro, estuve a punto de seguir aquella senda.
Pero no, en lo más profundo de mí sabía lo que debía hacer, así que cerré los ojos y di mi último suplico a los dioses, les supliqué me dieran el valor y la fuerza necesaria para soportar lo que venía, y les supliqué por mi familia. Cuando abrí los ojos lo hice con una decisión increíble, y emprendí la marcha a esta habitación en que ahora espero de rodillas mi castigo.

Cuando entre, toda la gente tenía actitud solemne, ceremonial. Muchos me miraban con verdadero pesar en los ojos. Frente al lugar donde habría de arrodillarme en unos momentos, se encontraba mi hijo y mi mujer, una mirada a mi hijo bastó para encargarle mucho a su madre, en cuestión de un segundo –esta vez un segundo y no una eternidad-, ya la tenía abrazada en su regazo.

Ella tenía la mirada llena de tristeza, me pregunto cuántos pedazos de corazón tendría en el pecho, cuántas veces se le habría roto el corazón esta semana, un pensamiento tomo parte de mí y me arrebato una o dos lágrimas: todo el dolor que ella sentía había sido a causa mía, y todas las veces que su corazón se fragmentará esta noche y las siguientes al recordar serían mi culpa.

Ahora estoy aquí arrodillado. El verdugo se arrodilla frente a mí y comienza a levantar los brazos, yo lo imitó como un espejo. Mis muñecas se introducen en los ganchos colgantes que están destinados a soportarlas y mantenerme en posición de cruz desde ahora y hasta mi muerte. Se levanta y va hacía mi espalda, mi familia queda frente a mí, ver sufrir a mi mujer me duele más que todo lo que me ha pasado. El filo de un cuchillo traspasa mi espalda, comienza a correr lentamente desde lo alto de mi espalda por todo lo largo de mi columna vertebral, gira hacía el lado izquierdo y se hace un cuadrado casi perfecto al llegar a la parte más lejana del centro de mi cuerpo. Tengo todo el torso lleno de sangre, y el mismo cuchillo comienza a rasgar mi piel simétricamente del lado derecho. Las lágrimas no dejan de brotar en el rostro de mi amada, mi alma no puede dejar de lamentarse al verla llena de dolor. Pero su dolor no opaca al mío, toda la sangre que corre desde mi espalda forma un charco en el suelo alrededor de mí.

Vamos, tú puedes, si soportas esto valdrá la pena –mi oído escuchaba el susurro del verdugo.- Ahora tomaré el hacha, lo siento, hazte el favor de no gritar, lo que viene es horrible.

Así eran las ceremonias, sabíamos que los únicos capaces de juzgar eran los dioses, y como buen verdugo, me daba palabras de aliento de vez en cuando, me decía todo lo que yo ya sabía, pero en momentos así, siempre es bueno saber que se cuenta con alguien que está ahí para apoyarte. Y él estaba ahí para mí.

El hacha está afilada, duele, he comenzado a sudar y eso arde intensamente en mis llagas, con el hacha, el verdugo a terminado de arrancar la piel de mi espalda, con su mano a tomado una de mis costillas, el charco de sangre ya le ha empapado los pies, el hacha rompe mi costilla, me retuerzo, estoy a punto de gritar, he abierto la boca pero no saco sonido alguno. Un líquido rojo mana de mi boca, no me permito estornudar, pero gota a gota cae la sangre que me acosa. El toma mi mano y vuelve a susurrar <<vamos, sé que puedes>>, después me rodea y de nuevo se arrodilla frente a mí. Pasan unos segundos, que nuevo pasan con la lentitud de la eternidad, respiró profundo, la espalda me duele, me duele mucho, no he dejado de ver a mi mujer, no pasa un segundo (ya sea normal o eterno) en que no sufra, me duele también el corazón, si hay algo que deseaba en la vida más que ser un buen guerrero y honrar mi vida y a los dioses, era jamás hacerla sufrir a ella. Y ahora está sufriendo.

Abro los ojos, que los había cerrado para sufrir en paz, porque siempre se sufre mejor con los ojos cerrados. Y apruebo con ligero movimiento de cabeza, mi verdugo de pone de pie y va a continuar con su labor. Repite el procedimiento con cada una de mis costillas.

Una vez que terminó, introdujo su mano en los agujeros de mi espalda y tomó un pulmón, sin cortarlo de mis vías respiratorias, lo sacó, y dejó suspendido en el aire, solamente sostenido por mis órganos internos. Con el otro pulmón hizo lo mismo. Mi mujer se desmayó.

Perdón –susurré.

En mis llagas echaron sal. Ardían de la manera más brutal que pude arder cualquier cosa en este mundo. El dolor era brutal.

No he gritado, creo que estoy a punto de morir…